Se terminó la investigación. Terminaste el bosquejo. Tu cesto de basura está lleno de malas ideas y las mejores llegaron a la pantalla de tu computadora. Después del arduo trabajo, tus logos finalmente están listos para ser presentados al cliente. Pero ¿cómo puedes estar seguro de que serán aceptados y apreciados por el cliente? A continuación algunos tips sobre cómo presentar tu conceptos al cliente.

Documenta y Habla del Por Qué

Una de las cosas más exitosas que puedes hacer al presentar una serie de conceptos de logos a tus clientes es documentar el razonamiento detrás de tus acciones. En otras palabras, déjale saber a tu cliente las razones que te llevaron a diseñar un logo en particular de cierta manera. Si fue para conectarlo más poderosamente con la audiencia meta, para simplificar la identidad, o para incrementar la percepción de la marca, inclúyelo en la presentación.

Puedes escribir un resumen profesional de tu motivación para cada composición. Es también importante citar las peticiones hechas por el cliente en las discusiones previas: una frase como “este concepto fue creado de acuerdo a su petición de…” Comprender el propósito y la motivación detrás de cada diseño ayudará al cliente a apreciar cada diseño individualmente.

La Primera Impresión es Todo

Asegúrate de que el cliente quede completamente impresionado con tus diseños la primera vez que los vea. Esto puede ser logrado revisando dos y tres veces la ortografía y otros detalles pequeños. También, si presentas tus logos en persona, móntalos profesionalmente en un cartón pluma o alguna otra superficie limpia. Si los estás presentando digitalmente, vía e-mail, etc., pon tu mejor trabajo al principio, crea una cubierta de página profesional, y agrupa todas las composiciones juntas en un documento PDF que pueda ser leído fácil y rápidamente.

Presenta Aplicaciones Prácticas

Pon su logo en cosas. Muéstrale cómo luciría su logo en una tarjeta de presentación, en un sitio Web, en diversa papelería, y cuando sea apropiado, en materiales promocionales como camisetas, plumas, tazas, etc. Entre más vea su logo en aplicaciones de la vida real, el cliente podrá tomar mejores decisiones.

Hazlo Lucir Profesional

Incluye variaciones de cómo se vería el logo en escalas de grises y en color. Ofrece diferentes variaciones de tamaño para demostrar su redimensionalidad y preséntalas con múltiples elecciones distintas, no sólo diez variaciones del mismo logotipo.

Sé Positivo y Seguro

Tú eres el diseñador. Haz pasado tu vida averiguando qué funciona mejor para el cliente. Al final ellos toman la decisión de cómo quieren que luzca su logotipo. Si has hecho tu tarea y has hecho las preguntas correctas, tú sabe qué funciona mejor de esos diseños. Véndele eso a tu cliente, y hazlo con seguridad.

Sé Paciente y Presto a Escuchar

Cuando un cliente quiere cambiar los diseños que has creado, recuerda que no es a ti como persona lo que quieren cambiar, sino el diseño. No lo tomes personal. No te sientas ofendido ni te pongas a la defensiva fácilmente. Sé paciente, escúchalos, y después de que te hayan dicho todas sus preocupaciones, ten una conversación civilizada sobre el por qué acuerdas o desacuerdas con lo que te han dicho. Siempre sé respetuoso pero también defiende el razonamiento detrás de tus diseños.

Encuentra un Punto en Común

Si crees que debe ser de una manera y el cliente cree que debe ser de otra, encuentra un punto de acuerdo en común. Pero también recuerda estas sabias palabras:

“Si quieres ser un diseñador bien pagado, dale gusto al cliente.
Si quieres ser un diseñador premiado, date gusto a ti mismo.
Si quieres ser un gran diseñador, dale gusto a la audiencia.”

Recuerda, y frecuentemente recuerda al cliente, que la meta a lograr no necesariamente es hacerte feliz a ti o a él con el diseño, sino hacer feliz a la audiencia meta con el diseño.

Autor: Preston D Lee